¿Pero de qué o de quién rescatar las milpas?

De su total desaparición, tras 3 siglos de Colonia española y más de 2 siglos del coloniaje mental con que se ha perpetuado hasta hoy día, la dominación de los campesinos mexicanos y centroamericanos. Porque cada día hay menos herederos de los saberes milenarios sobre los policultivos y las nuevas generaciones adoptan los principios de los monocultivos característicos de la agricultura occidental, despreciando la experiencia de nuestros antepasados en el arte de adaptar la variedad de la naturaleza en cultivos combinados que deberían seguir dándonos sus frutos a lo largo y ancho de nuestras regiones mesoamericanas, con provecho para nuestra salud y sin perjuicio para la biodiversidad…

La voz de orden de nuestra Cruzada es descalificar la soberbia de Occidente cuyos voceros llegaron a imponer los arados con bovinos, los surcos con sistemas de riego para monocultivos, la tumba roza y quema, los fertilizantes e insecticidas químicos, la ingeniería genética para uniformar las semillas y las lógicas mercantiles para sacar los elementos de las milpas de su sinergia y explotarlos masivamente por separado.

Nuestra Cruzada se propone rescatar desde la calidad de las tierras y sus formas de tenencia, hasta la variedad de nuestros alimentos y sus propiedades originales, pasando por el reconocimiento oficial y mundial del patrimonio cultural que representan las milpas. Nos proponemos devolver la dignidad del papel histórico, social y económico de los campesinos ya idos y de los vivos y por venir, apoyando sus conocimientos y su actividad mediante el consumo de sus productos y la vigilancia de precios justos para ellos.

La Trilogía: calabacita, maíz y frijol.

Cucurbitáceas

De origen americano.

Maíz

Planta emblemática como alimento fundamental. En América, simboliza nuestra carne.

Frijol

Leguminosa complementaria del maíz. En Asia es la soya para el arroz y en Europa lentejas y garbanzos para el trigo.